Jorge Sapag hizo el pasado 28 de mayo una nueva defensa del método de fractura hidráulica para la explotación de hidrocarburos no convencionales, manifestando que no habrá lugar para argumentos fundamentalistas que no tengan sustento científico y aseguró: “No vamos a dejar que echen por tierra una perspectiva brillante”.

Sus declaraciones se realizaron en la asamblea extraordinaria del Consejo Federal de Medio Ambiente (Cofema), donde Sapag se reunió con los secretarios de Medio Ambiente de todas las provincias.

Durante el discurso de apertura, el mandatario se pronunció en contra de los ambientalistas que se oponen al “fracking”, argumentando que ocasiona daño ambiental o sismos, y dijo que “no hay manera posible de hacer lugar a un fundamentalismo ambientalista que nos lleve a decir que el gas y petróleo no pueden ser extraídos por razones ideológicas”.

Sostuvo que la actividad es necesaria para superar el déficit energético y “para atender nuestros hogares, el campo, la industria”, y agregó que el Estado es el que se encargará de hacer los controles necesarios “de acuerdo con las reglas del arte, la ciencia y la técnica. No vamos a aceptar que si algún país lo prohibió vengan a echar por tierra una perspectiva brillante para una República como la nuestra”, aseveró en relación con Francia.

Por otra parte, el mandatario provincial justificó el uso del agua en la explotación de shale gas y shale oil, aseguró que las operadoras tienen la “obligación de tratar el agua y reutilizarla” y les recordó que deberán respetar los mandamientos que establezca el Estado provincial en la materia.

La explotación de no convencionales fue uno de los temas principales en la sesión del Cofema y, en este sentido, el secretario de Medio Ambiente de Nación, Omar Judis, declaró que “el país necesita desarrollar su potencial con responsabilidad. Esta asamblea busca dar soluciones al desarrollo argentino y que, a su vez, lo hagamos sin dañar a los poseedores de los recursos”.

Asimismo, el secretario de Medio Ambiente de la provincia, Ricardo Esquivel, especificó que el año pasado se evaluaron más de 900 pozos, de los cuales la mitad fueron no convencionales.
“Hay más de 300 pozos perforados y en ninguno de ellos ha habido impactos ambientales. Están siendo controlados en cada etapa de perforación y estimulación hidráulica”, garantizó el funcionario provincial. (La Mañana de Neuquén).