Desde el gobierno nacional se evalúa una baja en el precio del barril criollo para lograr así una baja en los combustibles.

La información fue publicada el viernes 10 de agosto por el diario Río Negro, que aseguró que ya hubo contacto entre el subsecretario de Recursos Hidrocarburíferos , Jose Luis Sureda, y los empresarios para bajar el precio. Se pondría así en peligro más fuentes laborales y además se bajarían los recursos de Neuquén en concepto de regalías.

Desde comienzos del 2016, se acordó un valor para el crudo neuquino de 67,5 dólares. Sin embargo, con la última baja del barril a nivel internacional, sumado a la intención de política de buscar una baja en el precio de los combustibles que alivie el bolsillo del consumidor, el gobierno evalúa reducir ese precio de incentivo.

Se piensa compensar la baja a con el aumento en el precio del gas, pero las petroleras no quieren pagar regalías sobre subsidios sino sobre el precio real del millón de BTU.

Lo cierto es que en la práctica el gobierno ya convalidó una baja del crudo. Al autorizar importaciones, la canasta de petróleo que compran las refinerías termina costando bastante menos que 67,5 dólares el barril.

Si baja el precio del barril criollo, la provincia de Neuquén perdería 80 millones
de pesos en regalías por cada dólar que baje, según las proyecciones del presupuesto.