EOG Resources, dejó la Argentina y se desprendió de sus últimos dos activos en la cuenca neuquina que mantenía junto a la estatal YPF.

La empresa, que nació como una “pyme” petrolera en base a un grupo residual de la ex Enron y se consolidó como una las firmas más importantes del sector, cobró 4 millones de dólares para venderle a YPF su participación en Bajo del Toro y Cerro Avispa.

“La receta no les funcionó”, señaló al diario Río Negro un empresario que conoce el negocio de EOG en Argentina. Explicó que la empresa contaba con un presupuesto de alrededor de 100 millones de dólares que se agotaron rápidamente con resultados por debajo de lo esperado.

En el año 2012, su titular, Mark Papa, estuvo en Neuquén en la feria denominada Clúster Shale organizada por la provincia y dio una conferencia donde explicó a los neuquinos la bondades del desarrollo no convencional. Al poco tiempo, EOG supervisó desde Estados Unidos la primera fractura hidráulica que realizó la estatal GyP durante la gestión de Guillermo Coco.

Pero las épocas doradas del shale nunca llegaron y la empresa decidió dejar la cuenca neuquina. Llegó a tener cuatro bloques y según la Provincia de Neuquén, ya no tiene activos en la cuenca.