Desde Electrificadora del Valle (EDVSA) se comenzó a tejer una historia de destrato, desgaste, y atrasos en los pagos a proveedores, desde hace cerca de un año, donde se cancelaban facturas con cheques hasta 120 días y se elegía a quien pagar, sin criterios claros.

Las cientos de firmas damnificadas, sumado a lo adeudado, debieron hacer frente al pago de impuestos como IVA e Ingresos Brutos y personal contratado, en ocasiones vendiendo los cheques o entregándolos a bancos para hacerse del efectivo, los cuales hoy deben hacer frente, al ser garantes de esos cheques que EDVSA no pagó.

Electrificadora del Valle S.A es una persona jurídica que opera desde 1993 domiciliada legalmente en la ciudad de Buenos Aires, bajo el CUIT 30-66195744-8, tiene bases operativas en Neuquén capital, Añelo, Rincón de los Sauces, Comodoro Rivadavia, Cerro Dragón, Las Heras y Rio Gallegos.

Según el Banco Central de la República Argentina (BCRA) al día 4 de mayo la firma adeuda a 13 entidades financieras cerca de 481 millones de pesos, número que se estima triplicar, dado que aún no se informan los cheques rechazados en periodo de cuarentena, del mes de marzo y abril, ni se ha actualizado su situación.

Por otro lado, se filtró una planilla de cálculo con una lista cercana a los 520 proveedores con una deuda impaga de 722 millones de pesos, de los cuales, varias de dichas compañías, aseguran puede duplicarse o triplicarse, por no haberse podido presentar todos los servicios prestados o productos entregados que no fueran procesadas sus facturas por la cuarentena y la falta de personal.

Para no quedar bien con nadie, fueron suspendidos por seis meses cerca de 1700 trabajadores, quienes fueron enviados a su casa y notificados por correo electrónico con un asunto titulado “acuerdo de crisis - suspensiones” con un cobro del salario en forma no remunerativa entre un 15% y un 30%.

Lo cierto, es que cientos de empresas, se encontraron en una situación crítica, al impedir seguir con su normal desenvolvimiento de la actividad, si poder hacer frente a pagar sueldos o cumplir con sus proveedores.
Por ello, una gran cantidad de las pymes damnificadas se agruparon y convocaron para este martes 5 de mayo a realizar una marcha y movilización a la base del Parque Industrial de Neuquén de EDVSA para protestar de la maniobra que la firma lleva adelante.

El accionista mayoritario y presidente de EDVSA, Osvaldo Nunzi, quien vive tranquilamente en el exclusivo barrio de Nordelta en Buenos Aires, contrató al Estudio Alegría, Buey Fernández, Fissore y Montemerlo, especialistas en restructuraciones financieras, responsables de un acuerdo leonino, que busca evitar la quiebra de la compañía, promoviendo la quiebra de sus proveedores, el cual fue deslizado por correo electrónico, denominado “Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE)”, supuestamente un mecanismo legal para licuar deuda.

Se les ofrece a sus proveedores un pago en efectivo de hasta 250 mil pesos, y 30 cuotas sin interés, lo cual para la mayoría dista mucho de lo que podrían aceptar.

Internamente, según fuentes consultadas, varios de los accionistas no están de acuerdo en los pasos llevados adelante por Osvaldo Nunzi y temen por “quedar pegados” en la demanda penal que se está preparando por parte de varios de los empresarios que sienten haber sido estafados, y aseguran se presentará en los próximos días.

En Neuquén, el Estudio Pujante Hernaez, están representando a un grupo importante de acreedores para instar el cobro de los créditos que tienen.

Desde la provincia de Neuquén, trascendió que se realizaron reuniones entre cámaras del sector y el gobierno, para ver de avanzar en encontrar una solución, y al contactarse con el Estudio que lleva adelante la propuesta, solo se conoció que solo pueden ofrecer el acuerdo brindado.