El ministro de Economía, Martín Guzmán, presentó esta semana en la Cámara de Diputados el Presupuesto 2021 que eleva el gasto en subsidios a la luz y el gas en comparación con el 2020. La nueva proyección representa más de $ 408.000 millones, que las del corriente año y superará los $ 565.000 millones. Es decir, un 38,5% más que los desembolsos actuales, pero un 195% más que el gasto pensado inicialmente para 2020, que era de un total de $ 191.000 millones.

Según los cálculos del Ejecutivo, solamente el nivel de subsidios actual será mayor en el caso de los aportes a la energía eléctrica, que el año que viene ascenderán a $ 448.373 millones, mientras que el programa de “Formulación y Ejecución de las Políticas de Hidrocarburos” tiene asignados recursos por $ 117.024 millones.

En el caso de los subsidios eléctricos, dentro del plan de gasto 2021 se destacan los siguientes puntos en la estrategia a seguir. La ejecución de las iniciativas contempladas en este programa permitirá desarrollar políticas y acciones que permitan el apropiado uso de los recursos del programa de Desarrollo Energético Provincial, a efectos de acompañar y contribuir con el desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional; finalizar las obras eléctricas en ejecución de los planes por convenios específicos, y la suscripción de nuevos convenios de financiamiento de obras con Provincias y/o Municipios; y la normalización progresiva del funcionamiento del mercado mayorista, sobre la base de costos competitivos y transparentes, señala la nota de El Cronista Comercial.

También se promueve el desarrollo de las energías renovables, así como universalizar los servicios energéticos modernos en todo el territorio nacional en condiciones de equidad e inclusión social, integrar nuestro país con otros mercados nacionales y regionales, y actuar sobre la demanda de manera de procurar un consumo racional de los recursos energéticos presentes y futuros.

En referencia al gasto en subsidios al gas se destacan los siguientes lineamientos: se contemplan las iniciativas orientadas al desarrollo y aprovechamiento de los recursos hidrocarburíferos, a fin de garantizar el autoabastecimiento a la demanda interna de energía, contribuir a la industrialización de estos recursos naturales y fortalecer la cadena de valor de la industria.

Además, se contemplan los programas destinados a garantizar el acceso al gas natural y al gas licuado de petróleo a los sectores vulnerables como a otras entidades de la sociedad civil que con sus actividades brindan ayuda y soporte a dichos sectores.

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