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La iglesia neuquina cuestiona el uso de la fractura hidráulica

El obispo de Neuquén, Virginio Bressanelli, duda de la credibilidad del gobierno y las operadoras por ser las partes interesadas, y hasta de las universidades que muchas de ellas reciben aportes de los mismos actores.
Darío Hernán Irigaray
Por Darío Hernán Irigaray

Por ello puso en marcha el viernes 7 de marzo pasado una campaña de fuerte crítica a la explotación no convencional de hidrocarburos, al cuestionar el cuidado del ambiente de gobiernos y empresas, por la sencilla razón de que "no son creíbles".

"La palabra creíble lamentablemente no es la del gobierno ni de las operadoras, porque son partes interesadas y porque la historia demuestra que a veces hay cambios de discursos, y que ha habido problemas de contaminación", dijo el obispo de Neuquén.

Bressanelli dio a conocer una cartilla con un contenido didáctico sobre la explotación no convencional de hidrocarburos, y específicamente, la técnica de la fractura hidráulica o "fracking", en una conferencia de prensa en la que fue acompañado por el sacerdote Rubén Capitanio, párroco de Centenario, conocido por su compromiso social desde que en la década de los 80 marchó al frente de los obreros de Piedra del Águila.

"Yo no digo que no nos digan la verdad, pero la credibilidad la dan los hechos. La credibilidad habrá que descubrirla por otro camino, de por sí deberían ser las universidades, pero a veces las universidades vienen subvencionadas por las mismas mineras y no tienen toda la libertad de expresión e intelectual para presentar las cosas como son", sentenció, de manera ciertamente inquietante, el Obispo.

Bressanelli se cuidó de aclarar que la postura del obispado no es contra el gobierno de Jorge Sapag, pero que no podía menos que hacer lo que expresó este viernes, so pena de "traicionar al pueblo".

"Para nosotros el cuidado del medio ambiente es parte del cuidado de la vida, y la vida es fundamental. Así como cuidamos la vida de las personas tenemos que cuidar la vida del ambiente, que es la casa de todos", dijo.

Expresó que existe un "temor" a las técnicas que se utilizan en la extracción no convencional y que no es solo en Argentina, sino también en otros países. "Cuando eso hace ruido, significa que hay que ponerle una atención especial, significa que algo puede haber que no funciona bien", dijo.

"Toda la supervisión que se debe dar al cuidado de la naturaleza tiene que ser hecho a raja tabla. Hay riesgos que se pueden correr y otros que no. Si los riesgos afectan de forma irreversible a la naturaleza esos riesgos desde nuestro punto de vista no se pueden correr", añadió.

Por su parte, Capitanio ratificó que con la cartilla se pretende trabajar más con la gente y que no representa una respuesta ni una actitud contra el Ejecutivo provincial.

Luego, pintó un panorama preocupante al indicar que según los datos de la secretaría de Ambiente en la provincia hay 10.000 pozos petroleros y que 3.000 contaminan. "El gobierno dice que no hay ningún riesgo", tiró.

Finalmente, al ser consultado sobre el anuncio de Jorge Sapag de enviar una nueva ley de Ambiente a la Legislatura, el párroco respondió: "La realidad nos muestra que no alcanza con las leyes".

Ya se repartieron para las comunidades 5.000 cartillas en una reunión en Zapala de todos los sacerdotes, diáconos y religiosas de la Diócesis.

Foto cortesía El circo de la vida
Fuente: Energypress / Rio Negro / Diario San Safael

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