Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido

Actualidad

Actualidad

YPF quiere socios para explotar yacimientos maduros de petróleo

Se trata de diez yacimientos de petróleo de Neuquén y Río Negro. La producción de este tipo de reservorios no integra el núcleo de negocios de la petrolera bajo control estatal, que se apoya en el incremento de la producción de gas y la puesta en valor de sus activos en Vaca Muerta.
Horacio Beascochea
Por Horacio Beascochea

La petrolera de mayoría estatal YPF está llevando adelante una serie de negociaciones con petroleras interesadas en invertir y agregar valor en la explotación de yacimientos maduros de petróleo de la cuenca Neuquina.

YPF evalúa desprenderse de un porcentaje de su participación y ceder la operación en campos que registren una producción declinante crudo por el tiempo que llevan en actividad. La compañía produce más de 35.000 metros cúbicos diarios (m3/d) de petróleo y está dispuesta a sumar socios para repartir la inversión en cerca de 10 yacimientos de petróleo de Neuquén y Río Negro.

Se trata de campos que en el pasado fueron estratégicos por sus altos niveles de producción de crudo. Pero que ofrecen un panorama completamente distinto por su elevado nivel de madurez. En esa lista figuran áreas como El Medanito, Chihuido de la Sierra Negra, Chihuido de la Salina y otros ubicados en la zona de Catriel como Señal Picada, Punta Barda y Barranca Los Loros, entre otros.

Lo que está evaluando YPF, según se consignó en la nota publicada por Nicolás Gandini en el portal EconoJournal es conformar un cluster de áreas que, en conjunto, sumen una producción cercana a los 20.000 barriles diarios de petróleo, a fin de tentar a algún inversor extranjero interesado en ingresar al negocio del upstream con una oferta ya considerable de petróleo. No se trata de una jugada menor: son unos 3000 metros cúbicos por día del hidrocarburo; el equivalente a lo que produce actualmente Chevron Argentina, quinto en el ranking de mayores productores locales de petróleo

Por tratarse de reservorios maduros, su extracción primaria de petróleo está en franca caída. Chihuido de la Sierra Negra, por ejemplo, que llegó a tener hace 20 años una oferta superior a los 17.000 m3/d del hidrocarburo, apenas aporta una séptima parte de esa cifra: 2510 m3/d según datos de enero del IAPG. El corte de agua en el yacimiento supera el 95 por ciento.

Según sostienen desde la compañía, compañías extranjeras con una estructura más pequeña y flexible que a su vez puedan financiarse a tasas más baratas podrían realizar una explotación más eficiente de los bloques.

La producción de este tipo de reservorios no integra el núcleo de negocios de la petrolera bajo control estatal, que se apoya sobre dos ejes centrales: el incremento de la producción de gas, un negocio más redituable y más estratégico para la Argentina, y la puesta en valor de sus activos en Vaca Muerta.

La estructura de YPF para operar sus campos maduros en la cuenca Neuquina está, en la mayoría de los casos, sobredimensionada. Se preparó para operar activos de escala muy superior a la que tiene en la actualidad. Su esquema de gastos fijos y de procesos para gestionar los yacimientos no se aggiornó en el tiempo y se requieren más recursos de los que utilizaría otra petrolera con una estructura más pequeña.

Lo complejo para encontrar socios es encontrar un modelo de contrato de asociación que deje contentos a todas las partes.

Compartinos tu opinión

Te puede interesar

Teclas de acceso