La compañía especializada en los servicios especiales de fractura de pozos Calfrac Well Services (CWS) presentó a mediados de noviembre su balance de operaciones del tercer trimestre del 2020 en el que el impacto de la pandemia fue muy importante, pero desde la firma esperan que el año cierre con un trimestre con saldo positivo.
La presidenta y gerenta de operaciones de Calfrac, Linsay Link, explicó que tras el freno que impuso la cuarentena obligatoria en los desarrollos en Argentina “el reinicio fue un proceso lento y las operaciones de fractura a gran escala en la región de Neuquén fueron de las últimas en reiniciarse”.
Explicó que en el trimestre que acaba de cerrar “si bien los resultados fueron sustancialmente mejores que los del trimestre anterior, no pudimos generar ingresos operativos positivos en Argentina debido a los bajos niveles de actividad”.
El vicepresidente de Mercado de capitales y Estrategia de Calfrac, Scott Treadwell, detalló que tras una actividad prácticamente nula en el segundo trimestre del año con cero sets de fractura en operaciones, el cierre de ese trimestre se dio con dos flotas pequeñas en actividad y ninguna grande, señala la nota en el diario “Río Negro”.
Durante el tercer trimestre la firma logró poner en actividad una flota grande en Neuquén, que es la que fue contratada por Tecpetrol para el desarrollo de Fortín de Piedra. Link destacó que “de cara al futuro, esperamos una mejora significativa adicional en nuestros resultados en Argentina y un retorno a la utilidad operativa positiva en el país en el cuarto trimestre, ya que casi todas las operaciones volverán a los niveles anteriores a la pandemia”.
Detalló que la perspectiva para el año que viene “parece sólida” y entre las señales de optimismo puso en relevancia el lanzamiento del Plan Gas 4 por parte del gobierno nacional, ya que aseguró que esperan que “los incentivos impulsen una mayor actividad en la perforación y terminación de recursos no convencionales”.
Treadwell fue aún más positivo y aseguró que “tenemos el potencial de poner, la mayoría si no todos, nuestros equipos de fractura para trabajar en Argentina, probablemente dentro de los próximos tres a seis meses”. Un plazo que advirtió que “dependerá de algunos programas de clientes, pero vemos la demanda allí con seguridad y que la utilización puede seguir aumentando”.
Compartinos tu opinión